Existen multitud de motivos por el cual muchas personas no han cursado sus estudios cuando tocaba.
Ser padres, no tener recursos económicos, ponerse a trabajar, viajar a otro país o no querer estudiar, han sido los motivos más comunes por el cual muchas personas no pudieron realizar sus estudios.
Esto se acentúo más en el pasado, ya que nuestros mayores, en su mayoría, debieron ponerse muy jóvenes a trabajar por falta de recursos económicos familiares en la posguerra.
La falta de estudios ha conllevado, en la mayoría de los casos, a tener trabajos precarios con bajos sueldos o tener que trabajar en puestos que no deseaban.
Sin embargo, nunca es tarde para renovarse. Los mayores de 25 e, incluso los mayores de 45-50 años, pueden retomar sus estudios que en su día no hicieron y reciclarse en el ámbito laboral, bien por cuenta propio o bien por cuenta ajena.
Una de las facilidades que da el Estado y las universidades es el acceso a estas ultimas para mayores de 25 años y para mayores de 45 años.
A continuación, explicaremos en qué consiste la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años.
Para las personas mayores de 25 años que no poseen estudios de grado para acceder directamente a la carrera equivalente universitaria, deberán hacer una prueba de acceso. Esta prueba puede hacerse de dos formas: mediante un curso de acceso o mediante una prueba libre. Vamos a ver en que se diferencian una de la otra:
Diferencias entre curso de acceso y prueba libre
Existen ciertas diferencias entre cada una de las vías para realizar la prueba de acceso:
- Para realizar la prueba, en el curso de acceso, el alumno dispondrá de apoyo académico y realizará evaluaciones de prueba antes de hacer la de acceso, garantizándose el aprobado. Por su parte, en la prueba libre, sólo se tendrá en cuenta las calificaciones que obtenga el alumno mediante el estudio por su cuenta.
- Los alumnos de curso de acceso disponen de dos convocatorias de examen (de mayo a junio para realizar exámenes ordinarios y en septiembre para el examen extraordinario). Mientras tanto, los alumnos de prueba libre de acceso sólo pueden acceder al examen ordinario una vez al año.
- Si el alumno que ha realizado un curso de acceso supera una fase de al menos una nota de 5, esta calificación podrá conservarse para las posteriores pruebas durante dos años. Los de prueba libre no conservan sus calificaciones, ha de comenzar de nuevo.
- Los alumnos de cursos de acceso podrán solicitar beca para pagar sus estudios, mientras que los alumnos de prueba de acceso libre no pueden solicitarla.
Es conveniente solicitar el apoyo mediante curso de acceso universitario, ya que dispones de apoyo académico, seguimiento y resolución de dudas, sobre todo cuando hace bastante tiempo que no has estudiado.
Puedes solicitar el apoyo mediante este curso de acceso en la misma universidad, en centros universitarios como el Centro Universitario San Bernardo, en academias o con profesores titulados particulares.
¿Por qué aprobar la prueba de acceso?
Para estudiar un grado, máster o una carrera universitaria, hay que tener un mínimo de conocimientos y cultura. Al no tener estudios de grado, el alumno debe tener la capacidad suficiente para poder aprobar la carrera elegida. Una prueba de acceso para mayores de 25 años es equivalente al Bachiller. Para ello, es esencial que el alumno antes esté en posesión de la ESO, FP de primer grado o equivalente; o superar 15 créditos ECTS univeritarios.
¿En qué consiste la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años?
Esta prueba se realizan en dos fases:
- Fase General: En el que se comprueba la madurez y su capacidad de razonamiento, así como su expresión escrita para poder estudiar con éxito. Se realizan ejercicios de comentarios de texto, lengua castellana y extranjera.
- Fase Específica: en el que se evalúan los conocimientos, capacidades y habilidades para poder cursar las diferentes asignaturas de la rama universitaria elegida por el alumno. En esta fase, se realizan dos ejercicios a elegir entre: Artes y Humanidades, Ciencias, Ciencias de la Salud, Ciencias Sociales y Jurídicas; e Ingeniería y Arquitectura.
¿Si estoy trabajando o tengo otros compromisos, podré estudiar en la universidad?
Claro que si. Existen dos opciones de estudio por tiempo disponible:
- Estudiante a Tiempo Completo: en el que el alumno deberá superar un mínimo de 48 créditos ECTS.
- Estudiante a Tiempo Parcial: en el que el alimono deberá superar un mínimo de 24 créditos ECTS.
Conclusión
Nunca es tarde para renovarse y reciclarse. Tener unos estudios permitirá acceder a empleos más profesionales, o poder abrir tu propia empresa. Saca un tiempo libre para destinarlo a tus estudios y crece profesionalmente.